En octubre de 2025, el medio estadounidense POLITICO reveló un informe que estremeció al país. El reportaje mostró 2,900 páginas de conversaciones de Telegram pertenecientes a miembros y dirigentes de los Young Republicans, la organización juvenil del Partido Republicano.
Durante más de siete meses, esos chats registraron mensajes con comentarios racistas, antisemitas, homofóbicos y violentos, escritos por personas que aspiran a ocupar cargos públicos en el futuro.
No eran simples bromas ni frases fuera de contexto: eran palabras que mostraban lo que realmente hay en el corazón de muchos que dicen representar los “valores cristianos”.
Para la comunidad latina, que en su mayoría comparte una fe profunda, esto resultó decepcionante. Muchos pensaban que ese partido defendía los principios del Evangelio, pero lo revelado demuestra que el discurso religioso no siempre refleja una vida cristiana auténtica.
“De la abundancia del corazón habla la boca.” — Mateo 12:34
Palabras que mostraron el alma.
Las capturas publicadas por POLITICO —y confirmadas por medios como The Guardian, AP News y ABC News— contienen expresiones que indignaron a creyentes de todo el mundo.
Estos son algunos de los mensajes reales que aparecen en el informe:
En inglés (original):
- “Everyone that votes no is going to the gas chamber.”
- “Great. I love Hitler.”
- “I’d go to the zoo if I wanted to watch monkey play ball.”
- “You’re giving nationals too much credit and expecting the Jew to be honest.”
- “Stay in the closet f—-t.”
- “They love the watermelon people.”
- “I’m ready to watch people burn now.”
Traducción al español:
- “Todos los que voten que no van a ir a la cámara de gas.”
- “Genial. Amo a Hitler.”
- “Iría al zoológico si quisiera ver a monos jugar pelota.”
- “Le estás dando demasiado crédito a los nacionalistas y esperando que el judío sea honesto.”
- “Quédate en el clóset, m—–n.” (insulto homofóbico)
- “Aman a la gente de la sandía.” (expresión racista contra afroamericanos)
- “Estoy listo para ver gente arder ahora.”
Fuente: POLITICO, 13 de octubre de 2025 (artículo original)
Cuando el corazón se aleja de la verdad.
Este caso no es solo un problema político, sino un reflejo espiritual.
Muestra lo que ocurre cuando la fe se convierte en una bandera de campaña, pero no en una forma de vida.
Muchos de estos jóvenes crecieron diciendo que su partido representaba a los cristianos, pero olvidaron que los valores de Cristo no se defienden con discursos, sino con acciones.
El verdadero seguidor de Jesús no se identifica por ideología, sino por su manera de amar al prójimo.
Dios no se impresiona con discursos religiosos ni con lemas patrióticos. Él mira el corazón.
“Nada hay encubierto que no haya de ser manifestado, ni oculto que no haya de saberse.” — Lucas 8:17
Así como el Señor expuso el pecado del rey David cuando cometió adulterio con Betsabé y mandó matar a su esposo Urías, también hoy deja al descubierto a quienes usan Su nombre sin vivir conforme a Él.
Dios no es juego de nadie. Él saca a la luz el pecado para corregir, no para humillar.
No se trata de partidos, sino de verdad.
En SomosCristianos.org no tomamos partido político.
No defendemos colores, defendemos la verdad.
Ni los republicanos ni los demócratas representan el Reino de Dios. Ambos tienen luces y sombras. La diferencia es que unos se autodenominan “el partido de los valores cristianos”, y eso exige coherencia.
La comunidad latina se siente herida no por ideología, sino por hipocresía.
Los demócratas también fallan, pero no se presentan como los guardianes de la fe.
El problema aquí no es político, es moral. Porque cuando alguien habla en nombre de Dios, sus palabras deben reflejar Su amor y Su justicia.
“Ay de los que llaman a lo malo bueno, y a lo bueno malo.” — Isaías 5:20.
Dios no se deja usar como herramienta electoral.
Así como expuso el pecado de David, también expone hoy a los que usan Su nombre para obtener poder.
El liderazgo sin humildad se vuelve arrogancia.
El poder sin Dios termina destruyendo.
Cuando alguien busca autoridad antes de buscar pureza, se convierte en instrumento de soberbia.
Un líder puede tener títulos y seguidores, pero si no tiene humildad, su liderazgo se convierte en tiranía.
La política necesita corazones limpios, no bocas llenas de promesas vacías.
“Todo camino del hombre es recto en su propia opinión; pero Jehová pesa los corazones.” — Proverbios 21:2
Reflexión final.
Este caso debe servirnos de advertencia.
La fe no se demuestra en los templos ni en los discursos, sino en el trato que damos a los demás.
Dios no protege a los hipócritas que hablan en Su nombre.
Él los corrige, los confronta y los expone, porque Su verdad no se negocia.
La comunidad cristiana latina no debe perder la esperanza.
El Señor sigue levantando jóvenes con corazones limpios, dispuestos a servir, no a dividir.
No pongamos nuestra fe en los políticos; pongámosla en Cristo, que no cambia y no miente.
“Y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.” — Juan 8:32.
Oración.
Señor,
gracias porque nada se esconde de Ti.
Tú ves lo que se dice en lo secreto y lo sacas a la luz.
Perdona a quienes usan Tu nombre sin conocerte.
Sana el corazón de nuestra nación y de sus líderes.
Enséñanos a hablar con amor y actuar con justicia.
Haznos una generación que viva la verdad,
no por conveniencia, sino por convicción.
Amén.
Epílogo: Dios no destruye al pecador, restaura su corazón.
Dios no se alegra cuando el pecado queda expuesto, pero sí cuando el pecador se vuelve a Él.
Su propósito nunca ha sido avergonzar, sino sanar.
Así como corrigió a David después de su caída, también ofrece hoy perdón a quienes reconocen su error.
El juicio de Dios no es venganza, es justicia con misericordia.
Él no quiere destruir al ser humano, sino liberarlo de la oscuridad que lo domina.
Por eso, aun en medio de los escándalos, sigue hablando con amor y verdad a quienes desean volver a Su luz.
“Si confesamos nuestros pecados, Él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad.” — 1 Juan 1:9.




