Lectura: Mateo 1
Versículo clave:
“He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, y llamarán su nombre Emanuel, que traducido es: Dios con nosotros.” – Mateo 1:23
Reflexión:
El primer capítulo de Mateo nos introduce al linaje de Jesucristo y al milagro de su nacimiento. Aunque la genealogía pueda parecer una simple lista de nombres, en realidad es un testimonio de la fidelidad de Dios a su promesa. Desde Abraham hasta David, y finalmente hasta Jesús, vemos cómo Dios cumple su pacto y trae al Salvador al mundo.
Pero más allá de los nombres, lo más impactante de este capítulo es la revelación de Emanuel: Dios con nosotros. En medio de nuestra humanidad quebrantada, Dios no nos dejó solos. Jesús no vino solo como un maestro o un profeta más; vino como Dios mismo, caminando entre nosotros, sintiendo nuestras luchas, nuestras alegrías y nuestras tristezas.
José, el esposo de María, nos da un gran ejemplo de fe y obediencia. Cuando recibe el mensaje del ángel, decide confiar en Dios, aunque humanamente la situación parecía difícil. Muchas veces Dios nos llama a confiar en Él sin entender completamente su plan.
Aplicación a nuestra vida:
- Dios siempre cumple sus promesas. Aunque a veces parezca que tarda, su plan es perfecto y se cumple en su tiempo.
- Jesús es Emanuel, Dios con nosotros. En cada circunstancia, podemos tener la seguridad de que no estamos solos.
- Como José, debemos aprender a confiar en Dios incluso cuando su plan no encaja con nuestra lógica humana.
Oración:
Señor, gracias porque en Jesús vemos tu fidelidad y amor por nosotros. Gracias porque no estamos solos, sino que Tú eres Emanuel, Dios con nosotros. Ayúdame a confiar en tu plan, aun cuando no lo entienda completamente. Quiero caminar en obediencia, sabiendo que tus promesas se cumplirán en mi vida. Amén.